
FOto: Gentileza diario Río Negro
Martín Soria declaró ayer durante dos horas frente al juez Juan Pablo Chirinos, el fiscal Miguel Fernández Jahde y el abogado defensor de su madre, Alberto Ricchieri. Toda su declaración, al igual que la que prestaron luego su hermana María Emilia y su cuñado, Mariano, fue registrada en video y será incorporada al expediente en el que se investiga el homicidio del ex gobernador Carlos Soria.
Al mediodía, en la planta baja de la Ciudad Judicial de Roca, habló con la prensa y agradeció el acompañamiento «de los vecinos de Roca y de toda la provincia» tras la inesperada muerte del mandatario. Visiblemente angustiado pero sereno, describió que el cuadro que vio al momento de arribar a la chacra, minutos después del disparo, fue «espeluznante».
«Entré a esa habitación y lo que vi no lo voy a olvidar jamás; ni lo que vi ni lo que estoy viviendo ahora… Vi, no al gobernador ni a un dirigente político sino a mi padre, irse… írseme en las manos…», dijo el intendente de Roca con la voz entrecortada al responder a la última pregunta de los periodistas, según publica hoy el diario Río Negro.
Abrió el diálogo diciendo: «Cinco días después de esta tragedia institucional y familiar la familia –yo, mi hermana y su novio Mariano– hemos concurrido ante el juez y el fiscal de la causa a declarar como testigos. Todo el mundo en el derecho sabe que a la familia le asiste el derecho de negarse a declarar, pero a nosotros nos parece fundamental estar aquí contando lo que nosotros vivimos la noche de esta tragedia, de tanto dolor».
Dijo que aquella noche de celebración del Año Nuevo en la chacra de la Ruta 6 estuvo «bien, totalmente normal».
«Por estas horas uno lamentablemente tiene que escuchar algunas cosas que son absolutamente incorrectas; escuchaba anoche en un medio de comunicación que yo estaba presente en el lugar del hecho y no es así… Mi hermana y su novio estaban en otra habitación, alejada, y fueron los primeros en llegar al lugar de los hechos. Yo llegué después, momentos antes de que llegara la ambulancia y encontré un cuadro que no se lo deseo a nadie…», indicó el hijo de Carlos Soria, quien afirmó estar viviendo junto a su familia «horas trágicas, llenas de dolor, indescriptibles… verle la cara a mi madre y ver cómo está emocionalmente es desgarrador».
Sobre la situación de Susana Freydoz aclaró que «está imputada» pero «no se le ha dictado la prisión preventiva porque está alojada con custodia policial, bajo tratamiento psiquiátrico, fuertemente sedada».
Martín Soria aclaró que no ha hablado sobre lo sucedido con su madre. «Tampoco he buscado hablar porque verdaderamente el cuadro era desgarrador y no creo que le haga bien ni a ella ni a mí como hijo».